El cuerpo de Juan Jiménez Regalado de 36 años de edad, policía municipal fue localizado después de horas de búsqueda este sábado. El 7 de septiembre quedó bajo los escombros luego del terremoto que sacudió Oaxaca y que ha sido el más potente en la historia del país.
Sin poderlo creer vieron salir los restos del policía y el llanto y los gritos salieron sin contenerse. Se acabó la esperanza.
Con los ojos rojos de tanto llorar y la cara desencajada por la desventura, doña Irma López Sánchez no quitaba la mirada de los trabajos que hacían soldados, marinos y policías federales, para retirar los escombros de lo que fue la comandancia de la Policía Municipal.
Ahí en la zona cero, quedó su esposo Juan Jiménez Regalado, de 36 años de edad, padre de tres hijos, el policía de guardia en la corporación, cuando el terremoto derrumbó la comandancia, que se ubicaba dentro del Palacio Municipal.
Los rescatistas sacaban cubetas, una tras otras, con los restos de esa edificación, pero no había noticias hasta hoy.
“¡Ay, nana!, quiero que lo saquen, quiero que salga de ahí”, susurraba entre lloriqueos.
Pero, la tarea no fue nada sencilla, ya que eran cientos y cientos de toneladas de escombros sobre la comandancia de la Policía Municipal, que impidian a los rescatistas de la Policía Federal, acompañados de perros adiestrados en la búsqueda, llegar hasta el lugar.
Al final de cuentas tuvieron que parar momentáneamente la busqueda de mas cuerpos, esto porque aun hay demasiados escombros y edificaciones que no tienen estabilidad y hacen aun más peligrosa la búsqueda por las constantes replicas.
Es la información que se tiene hasta el momento.
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